OPIOIDES Y MEDICAMENTOS DE PRESCRIPCIÓN


 OPIOIDES Y MEDICAMENTOS DE PRESCRIPCIÓN

La mayoría de las personas que toman medicamentos por prescripción médica, lo hacen de manera responsable. Sin embargo, el uso o abuso de drogas de prescripción sin razón médica continúa siendo una preocupación seria dentro del área de la salud pública. Cuando se abusan ciertas drogas de prescripción, como los opioides, los depresores del sistema nervioso central (SNC) y los estimulantes, éstos pueden alterar la actividad cerebral y llevar a la dependencia y posible adicción.

Clases de drogas de prescripción que son frecuentemente abusados:

·         Opioides, que se prescriben para tratar el dolor;

·         Depresores del sistema nervioso central (SNC), que se utilizan para tratar la ansiedad y los trastornos del sueño;

·         Estimulantes, se utilizan para tratar el trastorno del sueño llamado narcolepsia, el trastorno de hiperactividad con déficit de atención (ADHD) y la obesidad.

Opioides


¿Qué son los opioides?

L os opioides se recetan por sus propiedades efectivas analgésicas de aliviar el dolor. Los medicamentos que pertenecen a esta clase a veces conocidos como narcóticos incluyen la morfina, codeína, y otras drogas analgésicas. Dentro de estos encontramos la morfina que se utiliza antes y después de la cirugía para aliviar el dolor severo. La codeína, menos eficaz que la morfina, se utiliza para dolores menos agudos. Como los opioides que se pueden recetar para aliviar el dolor incluyen la oxicodona (OxyContin), propoxifeno (Darvon), hidrocodona (Vicodin) e hidromorfona (Dilaudid), así como la meperidina (Demerol) que se usa menos debido a sus efectos secundarios.

¿ Cómo afectan los opioides al cerebro y al cuerpo?

La forma de actuar de los opioides consiste en adehirirse a proteínas específicas llamadas receptores de opioides, que se encuentran en el cerebro, la médula espinal, y el tracto gastrointestinal. Cuando esto sucede los receptores de opioides, bloquear la transmisión de los mensajes de dolor al cerebro. Además de esto los opioides producen somnolencia, causan constipación, y dependiendo de la cantidad de la droga que se ha tomado pueden causar depresión respiratoria. Los opioides también pueden causar euforia porque afectan las regiones del cerebro que controlan lo que percibimos como placer.

Consecuencias del uso y del abuso de los opioides

El uso frecuente de los opioides causan una tolerancia a estas drogas, por lo cual las personas que las toman tendrán que utilizar dosis mayores para lograr los mismos efectos iniciales. El uso a largo plazo también puede llevar a la dependencia física y a la adicción, es decir, que el cuerpo se adapta a la presencia de la droga y si su uso se reduce o se suspende, ocurren síntomas del síndrome de abstinencia. Los síntomas que se manifiestan son:

•  Desasosiego.

•  Dolores musculares y de los huesos.

•  Insomnio, diarrea, vómito.

•  Repentinos de escalofríos con erizamiento de la piel (cold turkey)

•  Movimientos involuntarios de las piernas.

Cuando se consume una sola dosis grande de un opioide puede causar una severa depresión respiratoria que puede conducir a la muerte. Sin embargo, se ha demostrado que el uso médico de opioides analgésicos debidamente administrados es seguro y rara vez causa adicción clínica ( uso compulsivo).

Riesgos al utilizar los opioides con otros medicamentos

Bajo supervisión medica los opoides se pueden utilizar con otros medicamentos sin correr riego. Sin embargo normalmente no se deberían utilizar conjuntamente con otras sustancias que depriman el sistema nervioso central, tales como el alcohol, antihistamínicos, barbituratos, benzodiacepinas, o anestésicos generales, ya que aumentaría el riesgo de generar una depresión respiratoria que pondría en peligro la vida paciente.

¿Qué son los opioides?

Los opioides, a veces llamados narcóticos u opiáceos, son un tipo de droga. Incluyen fuertes analgésicos recetados como oxicodona, hidrocodona, fentanilo y tramadol. La droga ilegal heroína también es un opioide.
Un profesional de la salud puede recetar un opioide para reducir el dolor después de haber tenido una lesión seria o una cirugía. Puede obtenerlos si tiene un dolor intenso debido a problemas de salud como el cáncer. Algunos proveedores los recetan para el dolor crónico.
En general, los opioides recetados que se usan para aliviar el dolor son seguros cuando se toman por un período breve y siguiendo las instrucciones de su profesional de la salud.

¿Qué es el trastorno por consumo de opioides?

El trastorno por consumo de opioides significa que usted tiene un patrón problemático de consumo de opioides. Este patrón causa mucha angustia y discapacidad (es decir, causa problemas e interfiere con su vida diaria). En vez de trastorno por consumo de opioides, a veces las personas lo llaman "dependencia de opioides" y "adicción a opioides". La dependencia significa tener síntomas de abstinencia cuando no se está consumiendo la droga. La adicción es una enfermedad cerebral crónica que hace que una persona busque drogas compulsivamente, aunque causen daño.

¿Cuáles son los tratamientos para el trastorno por consumo de opioides?

Los tratamientos para trastorno por consumo de opioides incluyen:

  • Medicamentos: Este tipo de tratamiento se conoce como medicamentos para el trastorno por consumo de opioides
  • Consejería y terapias conductuales
  • Tratamiento residencial y hospitalario

¿Qué medicamentos tratan el trastorno por consumo de opioides?

Los medicamentos utilizados en el tratamiento para trastorno por consumo de opioides son:

  • Metadona, buprenorfina y lofexidina: Pueden disminuir los síntomas de abstinencia y los deseos de consumir droga. Funcionan actuando sobre uno u otro de los receptores de opioides del cerebro. Pero estos medicamentos son diferentes porque no le hacen sentir drogado. A algunas personas les preocupa que, si toman metadona o buprenorfina, significa que están sustituyendo una adicción por otra. Pero no es así. Estos medicamentos son un tratamiento. Restauran el equilibrio de las partes del cerebro afectadas por la adicción. Esto permite que su cerebro sane mientras trabaja para recuperarse. Puede tomar estos medicamentos de manera segura durante meses, años o incluso toda la vida. Si desea dejar de tomarlos, no lo haga por su cuenta. Primero debe hablar con su profesional de la salud y juntos elaborar un plan para tratar la adicción
  • Naltrexona: Funciona de manera diferente a la metadona y la buprenorfina. No ayuda con los síntomas de abstinencia o los antojos. En cambio, elimina el efecto agradable que causa consumir opioides. Esto significa que se toma naltrexona para prevenir una recaída, pero no como tratamiento para dejar los opioides. Debe dejar los opioides durante al menos 7 a 10 días antes de poder tomar naltrexona. De lo contrario, podría tener síntomas de abstinencia graves
  • Un medicamento combinado que incluye buprenorfina y naloxona: La naloxona es un medicamento para tratar una sobredosis de opioides. Si lo toma junto con buprenorfina, será menos probable que haga un mal uso de la buprenorfina

¿Cómo ayuda la consejería a tratar el trastorno por consumo de opioides?

La consejería para trastorno por consumo de opioides puede ayudar a:

  • Cambiar su actitud y comportamiento relacionado con el consumo de drogas
  • Desarrollar habilidades para una vida sana
  • Continuar con otras formas de tratamiento, como medicamentos

Hay diferentes tipos de consejería para el tratamiento por consumo de opioides, incluyendo:

  • Consejería individual: Puede incluir establecer metas, hablar sobre retrocesos y celebrar avances. También puede incluir tratar inquietudes legales y problemas familiares. La consejería a menudo incluye terapias conductuales específicas, como:
    • Terapia cognitiva-conductual: Ayuda a reconocer y eliminar patrones negativos de pensamiento y comportamiento. Enseña capacidades para lidiar con problemas, incluyendo cómo controlar el estrés y cambiar los pensamientos que hacen que usted desee usar en forma indebida los opioides
    • Terapia de estímulo de la motivación: Ayuda a aumentar la motivación para cumplir con su plan de tratamiento
    • Manejo de contingencias: Se enfoca en entregar incentivos para una buena conducta con el fin de mantenerle alejado de los opioides
  • Consejería grupal: Puede ayudarle a sentir que no está solo con sus problemas. Entrega la oportunidad de escuchar sobre las dificultades y los éxitos de otros que tienen los mismos desafíos. Esto puede ayudarle a aprender nuevas formas de lidiar con las situaciones que enfrenta
  • Asesoramiento familiar: Incluye parejas o cónyuges y otros familiares que están cerca de usted. Puede ayudar a reparar y mejorar sus relaciones familiares

Los consejeros también pueden referirlo a otros recursos que pueda necesitar, como:

  • Grupos de apoyo entre pares, incluyendo programas de 12 pasos como Narcóticos Anónimos
  • Grupos espirituales y basados en la fe
  • Pruebas de VIH y detección de hepatitis
  • Manejos de casos o cuidados de salud
  • Apoyo laboral o educacional
  • Organizaciones que ayudan a encontrar alojamiento o transporte
  • Organizaciones que lo ayudan a encontrar vivienda o transporte

¿Cuáles son los tratamientos residenciales y hospitalarios para el trastorno por consumo de opioides?

¿Cómo se puede tratar la adicción a los medicamentos recetados?

Los programas residenciales combinan servicios de vivienda y tratamiento. Usted vive con sus compañeros de casa y pueden apoyarse mutuamente para seguir con su rehabilitación. Los programas hospitalarios para pacientes internados combinan servicios de atención médica y tratamiento de trastorno por consumo de opioides para personas con problemas médicos. Los hospitales también pueden brindar tratamiento ambulatorio intensivo. Todos estos tipos de tratamientos son muy estructurados, y en general incluyen varios tipos diferentes de consejería y terapias conductuales. También suelen incluir medicamentos para el tratamiento de trastorno por consumo de opioides.

Años de investigación han demostrado que los trastornos por consumo de drogas son trastornos del cerebro que se pueden tratar eficazmente. El tratamiento debe tener en cuenta el tipo de droga usada y las necesidades del individuo; para que de buenos resultados, es posible que deba incluir varios componentes, tales como desintoxicación, apoyo psicológico y medicamentos. Tal vez sean necesarios varios ciclos para que el paciente logre recuperarse totalmente.58

Las dos categorías principales de tratamientos para el trastorno por consumo de drogas son los tratamientos conductuales (como el control de contingencias y la terapia cognitivo conductual) y los medicamentos. Los tratamientos conductuales ayudan al paciente a dejar de consumir la droga modificando hábitos nocivos de pensamiento y conducta, enseñándole estrategias para controlar el deseo de consumir drogas y evitar las situaciones y factores que podrían llevarlo a una recaída o, en algunos casos, proveyendo incentivos por la abstinencia. Los tratamientos conductuales—que pueden consistir en ayuda psicológica individual, familiar o grupal—también pueden ayudar al paciente a mejorar sus relaciones personales y su capacidad para desempeñarse en el trabajo y en la comunidad.58

La adicción a los opioides recetados puede tratarse además con medicamentos, entre ellos la buprenorfina, la metadona y la naltrexona (ver "Medicamentos para el trastorno por consumo de opioides" a continuación). Estos medicamentos pueden evitar que los opioides afecten el cerebro (naltrexona) o pueden aliviar los síntomas de abstinencia y el deseo intenso de consumir la droga (buprenorfina y metadona), ayudando así al paciente a evitar las recaídas. Los medicamentos para el tratamiento de la adicción a los opioides a menudo se administran en combinación con apoyo psicosocial o tratamientos conductuales en lo que se conoce como tratamiento con asistencia de medicamentos (MAT, por su sigla en inglés).59 También hay disponible un fármaco (lofexidina) que reduce los síntomas físicos de la abstinencia.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario